Éxodo 31: El llamado especial de Dios para su pueblo

En este artículo exploraremos el capítulo 31 del libro de Éxodo, el cual nos presenta el mensaje de Dios a Moisés durante los 40 días y las 40 noches en el monte Sinaí. En este capítulo, Dios llama por su nombre a Bezaleel y le concede el Espíritu de Dios para que realice diferentes obras en el tabernáculo. También se menciona que Dios ha dado capacidades a Bezaleel en diversas áreas como la sabiduría, la inteligencia, la ciencia, el arte y la construcción de objetos y mobiliario para el santuario.

Este pasaje nos muestra que Dios conoce a sus siervos por nombre y los llama a utilizar sus habilidades y talentos para Su gloria. Todos tenemos capacidades y talentos que Dios nos ha dado, y es nuestra responsabilidad ponerlos al servicio del Señor. Bezaleel fue elegido por Dios para construir el santuario debido a sus habilidades en diferentes áreas artísticas, y también tuvo la libertad de utilizar su creatividad en la construcción de diversos elementos del santuario.

Además de Bezaleel, también se menciona a Aholiab, otro hombre de la tribu de Dan, a quien Dios también ha llenado de sabiduría y habilidad para trabajar en la construcción del santuario. Estos hombres tenían la responsabilidad de dirigir y enseñar a otros en la construcción del santuario, utilizando sus dones y talentos otorgados por Dios.

El capítulo también nos recuerda la importancia del día de reposo, el cual es mencionado varias veces a lo largo del libro de Éxodo. Dios estableció el sábado como un día sagrado y de reposo, como señal entre Él y Su pueblo. Es un día de santificación, en el cual debemos abstenernos de hacer nuestras labores diarias y dedicarlo a adorar y descansar en Dios. Guardar el día de reposo es una expresión de obediencia, fidelidad y amor hacia Dios.

El capítulo concluye con Moisés recibiendo las tablas del testimonio, las cuales contienen los diez mandamientos escritos por el dedo de Dios. Estas tablas son una señal duradera y sólida de la ley de Dios, la cual no puede ser cambiada ni ignorada. Guardar los mandamientos de Dios es una forma de demostrar nuestro amor por Él y obedecer Su voluntad.

En resumen, el capítulo 31 del libro de Éxodo nos enseña la importancia de utilizar nuestros talentos y habilidades para servir a Dios, así como la importancia de guardar el día de reposo y obedecer los mandamientos de Dios. Nos muestra que Dios nos conoce por nombre y nos ha dado dones especiales para glorificarlo y servirle. Recordemos siempre que nuestro servicio a Dios no debe interferir con la observancia del día de reposo, y que guardarlo es una expresión de amor y obediencia hacia Él. Sigamos creciendo en el conocimiento de la Palabra de Dios y compartamos estos mensajes con otros para la edificación mutua.

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